y otravez parada, que se le va a hacer?
Sigo aqui, sentada, esperando, aunque esta vez con compañia. Mi francés se ha trasladado a mi caluroso ático, bueno, a nuestro, que bien suena..
Pasan los días, reviso el correo, el físico y el digital sobretodo el último, me levanto y lo primero que hago es correr a mirar las llamadas perdidas del teléfono, por si alguna alma perdida ha decidido dejarme un mensaje..
y reviso el mail, nada, sigue esperando Nadia, dicen que quien sabe esperar encuentra recompensa, y quien proyecta crea, seguiré entonces en ello...
Miro, un mail! si, una llamada, siii! una entrevista, genial!!!
Me levanto, me visto me acicalo, reviso mi bolsa, pues no acostumbro a llevar bolso.. me hace como diria.. parecer más responsable, mayor, y yo quiero seguir siendo esa eterna estudiante de la vida que se pasea con cualquier bolsa atada a un costado...
La dirección: barcelona, el destino siempre me lleva allí, que me deparará barcelona, esa ciudad llena de gentío y ruido.
Hago la entrevista, el entrevistador se llena la boca con tecnicismos que ni el mismo sabe que quieren decir, la típica pose del que se quiere hacer el interesante.. un publicista más en este mundo tan acosado por los medios de comunicación..
Se despide con un:
- El lunes nos reuniremos, y además tengo más entrevistas. El jueves, o viernes te llamo para decirte.
Salgo de ese edificio acristalado y me dirijo una vez más a la realidad, a nuestra realidad. La espera.
